

Para acreditar su Calidad,
Bioética y Relevancia Médica el Laboratorio Clínico debe contar con un Responsable que sea capaz
de:
1.- Garantizar que la organización
cuenta con un Sistema de Gestión de Calidad Integral que abarca todas las estructuras, procesos y resultados.
2.- Contar con un Código de Ética que cumple los requisitos de la
OPS en el que además se establece una política anti dicotomía firmado por todo el personal.
3.- Vigilar que el Laboratorio aplica un Programa Interno de Control de Calidad
(PICC) en todas y cada uno de los mensurandos.
4.- Participar
en un Esquema de Evaluación Externa de la Calidad (EEEC) que esté acreditado ISO17043 desarrollado por auténticos
Profesionales del Laboratorio Clínico.
5.-
Aprobar la evaluación de cada una de las pruebas y desarrollar una investigación dirigida para solucionar la
problemática de aquellos análisis no conformes.
6.-
Documentar la mejora continua de la calidad basada en evidencia.
7.- Cumplir los requisitos de la Norma ISO 15189 a través de una auditoría externa que se lleve a cabo
por auténticos Profesionales del Laboratorio Clínico.
Aunque
los Programas Internos son esenciales para lograr la precisión, es necesario complementarlos con las Pruebas de Aptitud
de la Evaluación
Externa de la Calidad, las cuales representan
una herramienta adicional para demostrar la confiabilidad, la trazabilidad y la comparabilidad no solo
entre laboratorios participantes, sino también
entre los sistemas de diagnóstico disponibles incluyendo analizadores,
calibradores, controles y reactivos.


El primer paso es el de dejar atrás la costumbre de trabajar basados en el binomio del ensayo
y error tan habitual en los países en desarrollo,
lo que en otras palabras significa dejar
de improvisar.
Hacer un proyecto sin una buena planeación, revisando la estructura, procesos
y resultados
es como tratar de construir un edificio sin planos.
Un buen plan de calidad debe incluir indicadores que sean buenos, bonitos y baratos.
LAS TRES E
1.- Efectividad 2.- Eficiencia 3.- Eficacia
